Ha decidido cambiar la bañera por un plato de ducha?
Cada vez son más las personas que deciden hacer un cambio de bañera por un plato de ducha, sencillamente porque llegados a una edad se hace más práctico o por alguna situación muy concreta, como por ejemplo que haya alguien imposibilitado de andar y esté en silla de ruedas, alguien de la familia tuvo un accidente y está escayolado y necesita ayuda a la hora de ducharse, situaciones como estas pueden ocurrir y lo mínimo que se quiere es contar con las comodidades básicas para que el día a día no sea tan tortuoso, sobre todo en casa, por eso la mejor opción es realizar un pequeño trabajo y cambiar la bañera por un plato de ducha.
Existen trabajos previos que hay que hacer antes de realizar la reforma como la compra de la bañera, el plato de ducha, la grifería y el azulejo, hay que pensar que muchas veces en el almacén donde hagas la compra no suelen tener los materiales en stock y hay que hacer el pedido a fabrica y estas suelen tardar como mucho de tres a cuatro semanas por lo que tendrías que planificar con tiempo la fecha para la reforma, una vez que sepas con seguridad el día que tendrás todos los materiales, necesitas coordinar tanto con el albañil como con el fontanero.
En un trabajo como es este que aunque parezca sencillo, necesitas de la colaboración de un fontanero para que haga las conexiones de las tuberías al plato de ducha y a la grifería y de un albañil para los trabajo de demolición, alisado de paredes y posteriormente colocación de azulejos, cuando se quita la bañera las paredes quedan desnudas y por consiguiente hay que revestirlas, si eres una persona precavida de seguro tendrás saldos del azulejo del baño guardados en el trastero, pero si no lo tienes eso supone tener que comprar unos que se asemejen lo máximo posible o de lo contrario colocar unas que coordinen con el resto de azulejos que tienes en el cuarto de baño.
Lo de la colocación del azulejo es algo que hay que pensar muy bien cómo va a quedar estéticamente, por lo general una bañera suele estar entre tres paredes, si ese es tu caso te fijarás que en una de ellas por encima de la altura de la bañera va la grifería de la bañera y si las vas a cambiar por una grifería de ducha la altura donde se coloca la nueva no es la misma, las griferías para duchas van un poco más altas y esto que significa en la colocación de un plato de ducha, que la pared donde van las tuberías de agua va a ver un trabajo previo de demolición y ampliación de tuberías para luego instalar las nuevas griferías y por consiguiente esa pared será azulejada a una altura mayor que las otras dos paredes, un consejo para que estéticamente quede mejor es que se quite el azulejo de las tres paredes a la misma altura, así visualmente quedará mucho mejor.
Antes de comprar en plato de ducha debes fijarte en la ubicación del sumidero, hay bañeras que lo tienen en el centro o a un lado, entonces lo más cómodo es que el plato de ducha tenga el sumidero en la misma ubicación, sino es así, el fontanero tendrá que hacer una ampliación de tubería para poder conectarla. Resumiendo, cambiar la bañera por un plato de ducha son sólo ventajas, pero necesitas organizar todo con tiempo, primero las compras de los materiales, programar la fecha para empezar con el trabajo y la coordinación y el trabajo en conjunto del albañil y del fontanero, si tienes todo eso bien organizado este trabajo te puede llevar como mucho tres días o cinco, ¡Si se presentara algún imprevisto! Comentarles que en una reforma por más pequeña que sea suelen ocurrir.
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