¿Constantemente te sucede que pasas frío en casa porque el funcionamiento de tu aparato de calefacción no es siempre el óptimo? ¡No te preocupes más! En el siguiente artículo te daremos la solución a este problema, explicándote paso a paso y de una forma sencilla el procedimiento a seguir para purgar los radiadores de calefacción de tu hogar.

Asumir la disposición de purgar el radiador de la calefacción de tu casa no tiene por qué ser algo por lo que romperse la cabeza ni que conlleve mucho dinero, de hecho, se trata de una tarea que no acarrea un gasto excesivo.
La necesidad de llamar por los servicios de un fontanero profesional para purgar tu sistema de calefacción tiene que ser para averías o emergencias, aunque este trabajo de fontanería puede ser fácil para algunas personas con las herramientas adecuadas y algo de maña, a continuación te explicamos todo lo que debes hacer.
Para tal tarea, los materiales que vas a necesitar son los que se nombran a continuación:
• Un destornillador o llave cuadrada.
• Un vaso o cualquier tipo de recipiente que sea capaz de contener líquido.
Ahora que ya sabes cuáles son los materiales para purgar los radiadores de calefacción, has de usarlos, estos son los pasos que tienes que seguir para cumplir con tal cometido:
Pasos a seguir para purgar los radiadores de calefacción!
1. En el caso de que la vivienda sea de una sola planta, se debe empezar por ubicar los radiadores más cercanos a la caldera para que sean los primeros en tratar. En cambio, si es un hogar de dos plantas, se debe iniciar con los radiadores de la planta alta.
2. Hay que asegurarse que la calefacción esté encendida y, entonces, aumentar la presión de la caldera para, así, dar inicio al purgado.
3. Es de suma importancia asegurarse de que la llave de paso del radiador esté abierta.
4. Básicamente, lo que se debe hacer para proceder a purgar el radiador y empezar a mejorar la calefacción de nuestro hogar, es colocar el recipiente debajo del purgador y hacerlo girar con el destornillador o la llave cuadrada.
5. A continuación, con cuidado y máxima prudencia… saldrá agua y presión de aire del purgador. El agua caerá en el recipiente y se debe dejar fluir hasta que ya no salga más aire a presión. Llegado este punto, se debe proceder a ajustar de nuevo el purgador.
6. Repetir el mismo procedimiento con los demás radiadores de la casa.
7. Una vez terminado el proceso, hay que revisar la caldera nuevamente y ubicar la presión en la posición recomendado por el fabricante.
Y listo! Así de sencillo. Si tienes problemas con la calefacción, ya has visto que purgar tu radiador es algo sencillo. Para mayor información contacta con un profesional llámanos al 922 28 23 55 ¡24 horas – Todo el año – Días festivos y fines de semana también a tu disposición!