
Aunque ciertamente resulta un inconveniente al que debemos prestar la debida atención, no debemos desesperarnos, pues existen maneras de solventar el problema (al menos momentáneamente) de manera sencilla y rápida. Además de recoger el agua desbordada en tu cocina, lavadero, baño o cualquier espacio de tu casa, existen algunas recomendaciones que podemos darte para salir con calma y victorioso del aprieto y no desfallecer en el intento.
Una tubería que colapsa puede tener varias causas, puede que alguna unión se haya desgastado, alguna pieza se ha desencajado o simplemente los golpes propios del paso del tiempo hayan causado la fuga.
A continuación vamos a detallar qué podemos hacer ante una situación de este tipo y cómo reparar la tubería.
Consejos para reparar fugas en una tubería de agua
– Antes que nada lo primero que debes realizar es ubicar la válvula general de suministro de agua y cerrarla de inmediato, esto con el fin de evitar que siga el flujo por las tuberías.
– Luego debes precisar ante qué tipo de fuga estamos, si hubo un desajuste de alguna de las juntas, si están colocadas correctamente, si hay que cambiar un sifón, o si alguna tuerca ha perdido su presión, etc.
– Si la causa es que una junta se ha salido de su lugar debemos aflojar allí mismo la tuerca (con ayuda de una llave o con la mano) y ajustar el tramo de la junta por el cual se está dando la fuga de agua y posteriormente se debe volver a colocar la tuerca y apretarla. Sin embargo, si solamente sucede que la tuerca dejó de presionar correctamente, solo será necesario volverla a apretar.
– Una posible solución para este tipo de situaciones de emergencias es colocarle una cinta autosoldable (vulcanizada) lo que te permitirá parar la fuga de agua rápidamente.
– Si esto no funciona y la causa del problema radica en que las juntas están golpeadas y deterioradas o rotas, lo ideal y necesario es sustituir la tubería por completo.
– Otra opción es emplear pegamento epóxico en el área por donde está fugándose el agua, esperar al menos 20 o 30 minutos y usar encima cinta adhesiva para asegurar. Luego de esto debes abrir la válvula y verificar si no se vuelve a derramar el agua o si la fuga persiste.
Cómo puedes observar, no es necesario entrar en pánico, solamente debes aprender a ingeniártelas rápidamente mientras llega el fontanero para realizar la reparación permanente y definitiva del problema. Con estos sencillos consejos puedes contener un desastre mayor y seguir disponiendo del agua sin que se inunde tu casa.
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